STATEMENT

 

 

                 En mi trabajo exploro las conexiones entre el realismo y la abstracción. Mis técnicas artísticas abarcan una amplia gama de posibilidades tanto técnicas como formales: desde los grandes formatos de acrílico sobre lienzo, obra  sobre papel hasta técnicas hibridas donde la fotografía y el material impreso tienen un papel protagonista. Es tal vez este‘Collage Pictórico’, una técnica hibridada más que mixta  que mezcla materiales fotográficos y publicitarios con pintura acrílica y tinta japonesa dónde  los elementos  se combinan formando extensas series narrativas de temáticas diversas; aspectos  estéticos, ecológicos,  socio-políticos cuestionan nuestras nociones de belleza y nos hacen reflexionar sobre procesos de producción  globales.

 

Actualmente, mi trabajo se puede resumir en tres temas principales: paisajes,  el proyecto „One Boxe, one Voice“ y las distopías, intimamente ligadas a la pandémia global cuyo final todavía no se dislumbra.

 

Las obras del primer complejo temático entienden el paisaje como una metáfora poética. La serie de paisajes “Cuando el viento sopla” muestra la belleza y el poder de la naturaleza: una tormenta tropical doblega las palmeras, la majestuosidad de los ya inertes árboles  o la bucólica armonía que revela la visión desde un verde exuberante de una torre del tendido eléctrico en desuso. Solo con la asociación “clima y cambio climático” se revelan en los paisajes las huellas de cambios dramáticos, la dinámica de destrucción y sus consecuencias.

 

Si bien las imágenes del paisaje pueden leerse como un llamamiento para abordar el tema del cambio climático, mis trabajos en la serie “One Box, one Voice” abordan otro problema acuciante: la pobreza y la migración como consecuencias directas de la globalización y del cambio climático.

 

Las cajas de madera (Boxes) hechas de materiales reciclados, una construcción simple con un compartimento en el interior y un asa en la parte superior que los limpiabotas etíopes  utilizan para almacenar y transportar materiales para limpiar los zapatos de los clientes, son la fuente de inspiración de este proyecto que empezó en Etiopía en el ano 2008, un proyecto socio-artístico que ofrecía a los limpiabotas, en su mayoría jóvenes, de Addis Abeba, una nueva caja a cambio de sus cajas usadas. Se intercambiaron y catalogaron más de 3500 cajas que pasaron a formar parte de la colección permanente de la galeria Listros de Berlín. Gran parte de las 3500 cajas pasaron por mis manos tanto en el proceso de catalogación como en sus posteriores instalaciones artísticas a lo largo de la geografía alemana. La fascinación de estas cajas/boxes radica en el „Material humano“ que las compone, en la pátina de histotia que hace a cada una única y personal. Contenedoras de innumerales biografias son mucho más que madera, alambre y caucho. En mi proyecto „One Box, one Voice „se intenta dar voz propia a cada una de estas biografías.

Aunque la inspiración  inicial surge en Etiopía, este ciclo de trabajos está geográfica y temporalmente abierto, ya que las peculiaridades locales apuntan a un fenómeno global; las cajas de limpiabotas se convierten en símbolos de la migración en la economía globalizada y la precariedad de muchas existencias.

 

La distopía es el tercer grupo temático de mi trabajo actual. En esta amplia serie temática se reflejan las experiencias  de la pandemia, los miedos difusos, las reacciones confusas. Los collages distópicos reflejan miedos universales: miedo a la soledad, a perderse en el mundo y  a la muerte.

 

La destrucción ambiental y el cambio climático, la pobreza y la migración, el miedo y la pérdida de orientación pueden leerse como leitmotiv de mi trabajo actual, que, sin embargo, también pretende transmitir esperanza y consuelo en su sublimación estética.